Editorial
SEMBLANZA Y OBITUARIO PARA GISELA HERNANDEZ MILLÁN
Profesora de la Facultad de Química de la UNAM y especialista en temas relacionados con la educación en ciencias, quien nos dejó el 17 de febrero pasado.
Para mí es un gran honor y responsabilidad que se me haya invitado a hacer una semblanza de Gisela Hernández Millán, una profesora muy reconocida en el mundo académico de la educación química, no sólo a nivel universitario, por laborar en la Facultad de Química de la UNAM, sino que sus enseñanzas fueron también recogidas en los diferentes planteles del sistema de bachillerato de la UNAM. Pero, fue más allá del campus universitario al dar innumerables cursos y talleres en muchísimas instituciones educativas del país y en el extranjero en diferentes niveles desde primaria hasta en escuelas normales en el campo de la formación docente en ciencias.
Ella estudió la licenciatura en química, la cual concluyó en 1966 y desde esa fecha mostró su interés por la educación en química al tomar su primer curso de actualización: “Curso teórico práctico de pedagogía de la química moderna” en 1966.
Aquí aparece (segunda de izquierda a derecha de la primera fila abajo) con sus profesores (de traje) y sus compañeros de la Facultad de Química en el Taller sobre Técnicas de la Educación. El cual, se llevó a cabo en South Western Baptist Theological Seminary, en Forth Worth, Texas U.S.A., en 1979.
En su currículo, se menciona que tomó mas 100 cursos de actualización en diversos temas relacionados con la educación, ya sea en el marco teórico de los porqués, como en el práctico de los cómo. Sin embargo, también se acercó a cursos de actualización en la disciplina para poder responder a los qué y en la filosofía y la historia de la ciencia para buscar respuesta en los para qué enseñar.
Para ello, además de su maestría en fisicoquímica tomó tres diplomados en temas de educación en ciencias
Con ese bagaje en constante movimiento fue invitada a participar en más de ochenta actividades como jurado o comisiones diversas para evaluar a sus pares.
Dio más ochenta cursos de licenciatura, 7 de maestría y casi 130 de actualización en enseñanza de las ciencias a profesores de todos los niveles tanto en el país como en el extranjero.
Además, fue arbitro de diversos artículos de revistas, de ponencias en congresos, de libros, y memorias, o sea más cincuenta arbitrajes. Lo que muestra lo reconocido que era su trabajo académico.
Escribió trece libros, tres capítulos de libros e hizo dos traducciones de libros relacionados con la educación en química para diferentes niveles educativos.
Dio varias conferencias magistrales y temáticas en México y en el extranjero y presentó l friolera de 185 trabajos en congresos.
Pero su trabajo académico no sólo se centró en la investigación y la enseñanza, lo que ya es un gran logro de vida, sino también en la gestión, al organizar cinco congresos nacionales e internacionales, participar en la organización otros catorce y tener varios puestos académico-administrativos durante su vida.
Esto muestra su enorme compromiso con la educación en ciencias, de la cual hizo su razón de ser en la Facultad de Química de la que se jubiló apenas en octubre del 2019.
Por todo ello, recibió varios reconocimientos, como ser Presidenta de la Académica Mexica de Profesores de Ciencias Naturales, AMPCN, por dos periodos, ser miembro de su Consejo Consultivo, tener el reconocimiento del Consejo Mexicano de Investigación Educativa, COMIE y recibir el Premio Sor Juana Inés de la Cruz, máximo galardón que ofrece la UNAM a sus académicas, de ello su hija Gabriela Pedrero, señala: “Recuerdo su orgullo y alegría al ser premiada con el reconocimiento Sor Juana Inés de la Cruz, por su labor destacada en la docencia el 8 de marzo de 2017” exactamente el Día de Mujer que ella fielmente representó y una de las causa por las que luchó calladamente y con su ejemplo.
No obstante, su vida va más allá, era una entusiasta de los viajes ya sea yendo a grandes y lejanas ciudades como Budapest o Estambul o “puebleando” en las costas veracruzanas, en la huasteca potosina, en la mixteca oaxaqueña o en la ribera del lago de Pátzcuaro. Los organizaba con mucha dedicación y los disfrutaba aún más.
Otro renglón poco conocido era su interés por la defensa de causas sociales, políticas o económicas que afectaban a nuestra sociedad, en especial a América Latina y a México, por lo cual acudimos a un sin fin de marchas y manifestaciones, donde calladamente mostraba sus preocupaciones en estos campos.
Asimismo, fue una excelente esposa, pues con Rafael su marido, compartía infinidad de intereses sociales y políticos y desde luego científicos, madre, al educar a tres excelentes hijos, Gabriela, Alejandra y Héctor, dos de ellas formadas en la Facultad y abuela, a quienes apachaba (del nahuatl, abrazar con el alma), siempre.
Con Rafael su esposo.
Con Ana Isabel León, Andoni Garritz, Julieta Fierro y su nieta Flor.
Fue una excelente amiga, además de profesora y colega como lo demuestran este ramillete incompleto de pesares por su partida:
Vicente Talanquer, investigador de la Universidad de Arizona, exalumno y exprofesor de la FQ-UNAM, premiado por la ACS en 2021 en el área de educación en química:
Con lágrimas en los ojos y un gran dolor en el corazón. Muchas gracias Gisela por tu amistad, y todo el apoyo que siempre me brindaste como educador.
Frida Díaz Barriga, Académica de la Facultad de Psicología de UNAM, reconocida investigadora internacional en temas relacionados con educación y colega muchos programas de formación docente:
Todo mi cariño y admiración para Gisela, una gran persona, su huella queda en muchos de nosotros, no podemos decirle adiós sino hasta luego.
Elizabeth Nieto, profesora de Carrera de la FQ-UNAM, compañera y amiga de Gisela:
La conocí desde hace tres décadas, el primer encuentro fue como docente, tuve la suerte de que fuera mi tutora en momentos de cambios en los planes de estudio en la FQ donde se requería de la expertise de los mejores docentes para llevar a cabo la implementación de nuevas asignaturas en el currículo de las nuevas carreras.
Te voy a llevar muy dentro de mi corazón y siempre serás mi amiga y guía en mi vida.
Gracias Gisela por todo lo que compartiste conmigo.
Con cariño Elizabeth
Gabriela Pedrero Hernández, su hija mayor, maestra en química y docente de bachillerato:
Mi madre disfrutaba viajar, pasear por México y otros países. Era una mujer puntual, trabajadora, decidida, perseverante, organizadora, solidaria. Escribimos junto con la maestra Norma Mónica López villa tres libros de química para secundaria, el trabajo en equipo fue enriquecedor. Recuerdo su orgullo y alegría al ser reconocida con el reconocimiento Sor Juana Inés de la Cruz otorgado por la UNAM, por su labor destacada en la docencia el 8 de marzo de 2017.
Norma Mónica López Villa, profesora de la FQ-UNAM, compañera y amiga de Gisela:
Con una visión especial para armar programas académicos ejemplares, ubicaba perfecto al expositor adecuado para cada temática de docencia. Ví de cerca, muchas veces, como hábilmente ajustaba su discurso y actividades planeadas en los cursos y talleres para atender a las necesidades de los asistentes o bien para destacar algún tema relevante que se asomaba en ese momento. Conocí lo que significa ser amiga leal y solidaria.
Nos acompañamos mucho. Buscábamos cómo coincidir. Estábamos una para la otra. Mi maestra de maestros. Mi amiga. Mi Gisela...
Plinio Sosa, profesor de Carrera de la FQ-UNAM, alumno, compañero y amigo de Gisela:
Yo fui su alumno, luego por ella empecé la carrera como académico y también nos hicimos muy amigos y compartimos muchos momentos en el área de la Educación Química. También me hice muy amigo de Gaby, Ale y Héctor, sus hijos. Con Rafael, su esposo, tuve innumerables conversaciones sobre ciencia y política. ¡La vamos a extrañar mucho!
Samuel Sosol, profesor del bachillerato UNAM, ya retirado y exalumno en cursos de actualización:
Descanse en paz, luz por siempre por ella. Una gran pérdida humana para su familia y par la Facultad de Química, nos formó y actualizó a muchos docentes tanto en los niveles medio-superior como superior. Mi agradecimiento a su compromiso docente y a sus enseñanzas en mi formación. Un fuerte abrazo a su familia.
Héctor Alejandro Cárdenas Lara. profesor de Carrera de la FQ-UNAM y compañero de Gisela:
Gracias por recordarnos a Gisela, tan humana, estará en nuestro corazón y en nuestros recuerdos académicos y en las alegrías compartidas.
Elizabet Nava Rodríguez, profesora del del bachillerato UNAM y exalumna en cursos de actualización:
Maravillosa docente y persona, siempre dispuesta a apoyarnos en nuestra formación docente.
Reyes Franco, profesor del del bachillerato UNAM y exalumno en cursos de actualización:
Qué triste noticia. Que esto lindos recuerdos tan gratos ayuden a soportar tan gran perdida.
Maricarmen Hidalgo, profesora del del bachillerato UNAM y exalumna en cursos de actualización:
Estoy muy triste…Para mi fue una de las mejores maestras que he tenido. Honesta, humilde, inteligente, sencilla, admirable exigente, sonriente, prudente, educada, respetuosa, LINDA PERSONA…por supuesto que la extrañaré mucho.
Silvia Porro, académica de la Universidad Nacional de Quilmes, Argentina:
Una persona muy querida para mí. Extrañaremos mucho a Gisela.
Martha Bulwik, académica y miembro de la Asociación de Docentes en la Enseñanza de la Química de la República Argentina:
Que En Paz Descanse.
Mario Mendoza Toraya, académico de Eureka Educativa, Colombia:
Lo lamento mucho. También la recuerdo con mucho cariño y respeto.
Lizbeth Cano, profesora y supervisora escolar en los Servicios Educativos Integrados al Estado de México:
En nuestra convivencia en la Academia Mexicana de Profesores Ciencias Naturales aprendí mucho de ella no solo en lo académico, en lo personal por su sencillez y hasta en lo gastronómico y cultural en algunas comidas compartidas. La recordaremos siempre con mucho cariño. Hasta la vista querida Gisela.
Otilia Valdés Galicia, profesora del bachillerato UNAM, ya retirada y exalumna en cursos de actualización:
En verdad lo siento mucho, era una gran mujer.
Susana Ramírez Ruiz Esparza, profesora del bachillerato UNAM, ya retirada y exalumna en cursos de actualización:
Una gran pérdida para la docencia en química, lamento mucho su partida.
Juan Tonda, investigador el Instituto de Energías Renovables de la UNAM:
Qué triste noticia, la voy a extrañar mucho. Conviví con ella en varios congresos de profesores de ciencias naturales, un abrazo para todos sus familiares y amigos.
Silvia Bello, profesora de la Facultad de Química de la UNAM, ya retirada, compañera y amiga:
La vamos a extrañar mucho, mucho. Gisela fue mi alumna, pero después nos hicimos amigas. Compartimos clases, curso, viajes, experiencias docentes y experiencias de vida. Sus enseñanzas de trabajo, respeto, generosidad y entrega estarán siempre con nosotros, siempre.
Jesús Valdés-Martinez, investigador del Instituto de Química y profesor de la Facultad de Química de la UNAM:
Lamento mucho esta pérdida. Era una maestra muy querida, siempre comprometida con la enseñanza.
Fina Guitart Mas, profesora de la Universidad de Barcelona, España:
Me uno a vuestro pesar. Recuerdo mucho a Gisela, con gran admiración y la nostalgia de los buenos momentos compartidos.
Carolina Guzmán Vázquez, profesora del del bachillerato UNAM y exalumna en cursos de actualización:
En verdad vamos a extrañar mucho a Gisela, en mi caso, me dejó muchos aprendizajes, fue una persona de gran corazón.
Cristina Rueda, Académica de la UNAM, ya retirada y expresidenta de la Academia Mexicana de Profesores de Ciencias Naturales, AMPCN:
Con gran tristeza me despido de mi amiga y colega Gisela Hernández. Compañera de muchas lides, ya fuera en la Academia Mexicana de Ciencias Naturales de la que fue presidenta o en tantos proyectos compartidos en la Facultad de Química; desde talleres breves hasta dirección de muchas tesis de maestría. En todos esos proyectos su compromiso, responsabilidad y gran generosidad fueron patentes. Pero también compartimos muchos momentos de alegría como andar en bicicleta por los jardines de Budapest o cuando disfrutábamos comidas con nuestros colegas en diversos congresos. La voy a extrañar.
Por Cristina Rueda, mayo 2021.